viernes, 23 de diciembre de 2011

Menú navideño alternativo

¡Uf!, casi no llego con tantas cosas que hacer estos días y tanta actividad bloguera, pero aquí estoy para proponeros unas opciones alternativas a las comidas típicas navideñas. Estas fechas pueden ser complicadas si eres vegetariano ya que por desconocimiento o por no saber qué hacer podemos acabar un poco defraudados, porque ser vegetariano no significa estar a dieta. Para intentar acabar con esta situación os propongo que tanto si sois invitados como anfitriones podáis elaborar un menú muy rico, especial y además económico que con los tiempos que corren no es nada despreciable.
Espero que os gusten.
Para empezar si se hacen canapés se puede incluir en el menú unos volovancitos de queso y tomate, muy sencillitos, para ello rellenamos los volovanes (se pueden encontrar en cualquier superficie) con tomate rallado que salpimentaremos y cubrimos con queso, introducimos al horno (solo por arriba) hasta que el queso se ponga doradito, ojo no se queme; también como entrante una sopa de calabaza y batata, está deliciosa.
Podemos aprovechar el famoso cardo, pero en lugar de hacerlo al estilo tradicional yo propongo unas barquitas de cardo rellenas, para ello cocemos el cardo y el lado cóncavo lo rellenamos con una mezcla de queso crema y frutos secos.
Los platos siguientes son más contundentes, así que tal vez yo los serviría como plato fuerte, el primero un cuscús especiado con pasas y piñones, aunque este si no hacemos mucha cantidad también podría ser un entrante; también muy rico es un hojaldrado de ratatoullie para ello necesitamos una lámina de hojaldre que cubriremos con berenjena, calabacín, tomate y cebolla a rodajas, salpimentamos y rociamos con aceite y al horno durante 30 ó 40 minutos o hasta que veamos que las verdura están hechas. Un wrap de tortilla relleno de manzana y frutos secos puede ser una opción muy elegante e innovadora.
Y para culminar una cena tan apetitosa que mejor que unos polvorones pero sin manteca.
Espero que mis ideas para un menú alternativo os hayan gustado y que cumplen 3 funciones sano, económico y vegetariano. ¡Felices fiestas!

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Y de postre... Polvorones de mantequilla




El polvorón es uno de esos postres que recuerdo desde bien pequeñita, siempre me han gustado. Su sabor dulce y tostado de la almendra y el ajonjolí, la textura suave y delicada que se deshacía en cuanto entraba en contacto con la lengua, incluso tener la boca llena y que tu padre te pida que digas "Pamplona" con el consiguiente desparrame del polvorón y dejando todo el suelo estucado jejeje. La verdad es que se me hace la boca agua solo de pensar en esos deliciosos dulces. Solo hay un problema, que están hechos con manteca de cerdo y claro al ser vegetariana es un pequeño inconveniente, y ya son casi 13 años sin ellos, así que tanto los echaba de menos que decidí hacerlos yo misma pero con mantequilla.     

Dado que estamos en estas fechas me aproveché del gran privilegio que supone tener un pastelero en la familia y me fui a su Obrador a recibir una clase práctica de elaboración de polvorones, y el resultado ha sido bastante bueno. A pesar de que tuve algún problemilla con la masa, cosas de principiantes. Ahí os dejo la receta.

Es súper fácil de hacer, hay que mezclar todos los ingredientes y amasar yo empecé con la batidora y los ganchos, pero como no estaba obteniendo el resultado esperado continué a mano. Creo que si no tenéis una amasadora con el accesorio de las palas es mejor hacerlo del modo tradicional. Después de estar bastante rato amasando tiene que quedar una consistencia compacta pero manejable. Hacemos una bola con la masa, aplastamos un poco con la mano y con un rodillo y mucho cuidado la extendemos hasta dejarla de un grosor de unos 2 ó 3 centímetros. Ahora con ayuda de un cortapastas de forma redonda recortáis los polvorones. Los ponéis en una bandeja de horno con papel vegetal y al horno a unos 200° durante 10 minutos más o menos, hay que dejar que tomen color pero que no se doren porque si se queme amarga.
Y voilà polvorones listos para la cena de nochebuena...aunque con las ganas que les tengo no creo que lleguen, tendré que preparar una segunda tanda.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Cuscús especiado


Hoy en día casi todo el mundo conoce el cuscús o cous cous entre otros muchísimos nombres, pero aún así os lo quiero introducir un poco más. Es una sémola de trigo duro consumida principalmente en el norte de África. Tradicionalmente se come con las manos, haciendo pequeñas bolitas que se introducen en la boca. Se sirve como segundo plata y dependiendo del punto geográfico en el que se sirva los ingredientes son diferentes. Existen tres tipos básicos, en Argelia va acompañado de garbanzos, habas, de una gran cantidad de legumbres y hortalizas (alcachofas, calabacines, patatas, berenjenas, cardos, hinojo, guisantes) y, algunas veces carne.
El mestuf, preparado con habas frescas y uvas pasas, está reservado para el mes del Ramadán.
El cuscús sahariano es servido sin legumbres ni caldo. En Tunicia, puede hacerse con carne y garbanzo que son obligados. 
En este caso yo me he inspirado en el mestuf para hacer este plato, pero añadiéndole algunos ingredientes y especias a mi gusto. Yo usé garam masala, pero si no tenemos podemos usar Ras el-hanout o especias de "Toque Morocco". Los "Toques" los puedes encontrar en casi cualquier supermercado, y tras el reciente descubrimiento del morocco, lo usamos para condimentar muchísimos platos, como la ensalada de tomate.
Para hacer esta receta lo primero que hay que hacer es picar finita la cebolla, y pocharla en una sartén con un poco de aceite, cuando empiece a transparentar añadimos las especias damos un par de vueltas y echamos el agua, las pasas y piñones, dejamos al fuego hasta que empiece a hervir. Entonces añadimos el cuscús y retiramos del fuego, tapamos y dejamos reposar durante 5 minutos.
Pasado este tiempo está listo para emplatar.

Este plato resulta delicado al paladar a pesar de las especias, ya que quedan suavizadas por las pasas y piñones. Se puede servir como entrante acompañado de un guiso de carne o pescado.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Wrap de tortilla con manzana, queso y salsa de frutos secos



Os presento mi wrap de tortilla relleno de manzana, cebolla y queso de cabra acompañado con salsa de frutos secos al jerez, esta receta es una buena opción para servir y sorprender en estas fechas navideñas.

La elaboración de este plato es muy sencilla, primero batimos bien los huevos con un poquito de sal, calentamos un poco de aceite en una sartén grande. Cuando esté caliente añadimos el huevo batido, queremos conseguir una tortilla grande y muy finita como una crep, para ello extendemos bien el huevo. Cuando se haya cuajado con cuidado le damos la vuelta para que se haga bien por ambos lados y reservamos.
En una sartén pochamos la cebolla hasta que empiece a transparentar, retiramos del fuego y reservamos. 
Ahora hay que hacer una compota de manzana, para ello pelamos la media manzana y la cortamos en cuartos, como no tenía mucho tiempo la hice en microondas, ponemos los trozos de manzana en un plato con un dedo de agua y ponemos durante 6 minutos más o menos a máxima potencia. Pasado este tiempo la sacamos y machacamos con un tenedor.
Mientras hacemos la salsa, para ello majamos en un mortero los frutos secos, una vez machacaditos pero tampoco mucho para que se noten los trocitos. Tostamos los frutos secos y cuando empiecen a dorarse añadimos el jerez y el agua para rebajar un poco el dulzor. Dejamos reducir la salsa.
Ahora montamos el wrap, ponemos la tortilla en un plato, extendemos el queso de cabra en el centro, encima ponemos la manzana y la cebolla. Cerramos el wrap haciendo un rollito con ella, y salseamos.

El resultado es una delicada explosión de sabores, un esponjoso bocado que comienza con el sabor dulce de la salsa resaltando la acidez de la manzana  suavizada sutilmente a través del queso.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Receta calabacera n°3

Y por fin publico mi tercera y última receta "calabacera" la verdad es que aquella calabaza que me regalaron ha cundido mucho, pero mucho, tanto que tres propuestas he podido compartir con vosotros. La de hoy es una sopa de calabaza asada y batata, no vi mejor opción para calentarnos en estos días en que el frío nos acompaña.






Para elaborar esta sopa primero pelamos la cebolla y la cortamos en gajos. Pelamos el resto de verduras, aclaramos y las colocamos todas en una fuente de horno, añadimos el ajo y el comino, salpimentamos y regamos con un hilillo de aceite.
Horneamos sin tapar y removiendo de vez en cuando durante 40 minutos a 180º o hasta que estén tiernas.
Cuando estén listas, las sacamos del horno y hacemos un puré con las verduras y el caldo. Ponemos en una cazuela y le damos un hervor. Servimos con unas hojas de cilantro por encima.

El resultado es una sopa suave de sabor ligeramente dulzón proporcionado por la calabaza, la batata y la zanahoria, que mezcladas con el cilantro potencia el sabor de esta últimas. Altamente recomendable y más para estas noches de invierno.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Desayuno navideño



La Navidad ya ha llegado a casa, y esta semana como es tradición he sacado de sus cajas el árbol, las bolitas, espumillón, Papas Noel y demás adornos que hemos reunido a lo largo de los años y de los viajes que por trabajo ha tenido que hacer mi chico para estas fechas, de los cuales siempre trae algún adorno navideño autóctono.
Así que después de estar media tarde liada con las bolitas, renos, calcetines gigantes y luchar contra mi gatito (cachorro) que está convencido de que todo aquello que cuelga del árbol son sus juguetes, me ha invadido un espíritu galletero y me ha apetecido hacer galletas de jengibre que son muy típicas de estos días.
Se me metieron en la cabeza días atrás hablando con Carmen, una compañera de trabajo que me decía que tenía muchas ganas de volver a comerlas, y con ese "run run" me puse a buscar y rebuscar por internet hasta que di con una receta que me gustó porque incorporaba la miel, que me encanta.
Mientras las hacía, ya totalmente abducida por Papá Noel, decidí hacer paquetitos regalo para unas buenas amigas mías, y desearles con ellos unas "Felices Fiestas", y espero que hayan podido disfrutarlas igual que yo en una mañana con un buen café.



Son muy sencillas, es la primera vez que las hacía y no me vi perdida en ningún momento. Primero tamizamos la harina con la maicena, el jengibre y la levadura en un bol.
Aparte mezclamos la mantequilla con el azúcar, luego añadimos el huevo, la miel, la vainilla y la sal. Cuando tenemos todo bien mezcladito unimos la harina con esta mezcla.
Cuando la masa ya no se pega mucho a las paredes del bol hacemos una bola con ella y la envolvemos en palel film, y dejamos reposar durante una hora en la nevera.
Pasado este tiempo precalentamos el horno a 180º por arriba y abajo, y ponemos una lámina de papel film en la superficie de trabajo, encima ponemos la masa, y encima de esta otra lámina de papel film, así evitamos que al amasar se pegue al rodillo.
Entonces con el rodillo aplanamos hasta dejar la masa con un grosor de aproximadamente medio centímetro. Con ayuda de un cortapastas cortamos las galletas y las vamos poniendo encima de papel vegetal en un bandeja de horno, reamasamos y volvemos a cortar, así hasta terminar con la masa. La primera tanda de pastas se deja durante unos 8 minutos o hasta que las galletas toman un tono dorado, las siguientes seguramente se harán un poco antes.
Las dejamos enfriar y las guardamos. Yo las dejé en un plato tapadas con papel film porque sabía que iban a durar poco, pero si van a estar más tiempo es mejor guardarlas en un tarro hermético.

Así que al día siguiente les llevé un par de paqueticos a las dos amigas, y pude compartir con los compañeros de trabajo y desayunar el sábado, me supieron a gloria, de hecho creo que esto podría convertirse en una tradición como el árbol, los renos, los adornos del mundo y los gatos que piensan que el espumillón es un juguete.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Receta calabacera n° 2


La tarta de calabaza o Pumking Pie es un postre típico americano que se sirve tradicionalmente en acción de gracias, aunque lo toman hasta la navidad, su ingredientes principales son la calabaza, evidentemente, y una mezcla de especias como canela, clavo, nuez moscada y jengibre. Tanto gusta que hasta venden latas con la carne de la calabaza ya preparada para realizar esta tarta, así como la mezcla de especias ya hecha, como en España es más difícil de encontrar tuve que hacer la mezcla yo misma. Este postre se caracteriza por ser dulce, de textura suave y cremosa, y con un sabor especiado que lo hace delicioso.

Como todavía tenía pendiente alguna recetas más con aquella calabaza recién sailidica del huerto que conseguí, aproveché que teníamos una comida familiar para hacer esta tarta, y así pude demostrar a algún que otro escéptico de la gastronomía americana que tengo en la familia, que hasta los "yankis" saben cocinar jejeje.

Bueno aquí os dejo la receta que seguí, la mezcla de especias como ya os he dicho la hice yo a mi gusto no quise arriesgar con el clavo así que seguí más o menos la siguiente proporción: 1'5 /3 de canela; 1/3 de jengibre; 0'5/3 de nuez moscada.

Intenté preparar la masa quebrada, pero fue otro de mis intentos culinarios "quebrados" para la próxima vez seguro que me sale. Así que tiré de congelador y una placa de hojaldre que siempre tengo de guardia por si acaso. Una vez resuelto este problema hice el relleno, para ello lo primero asé la calabaza con piel, porque luego es mucho más fácil desprenderla. Una vez asada la ponemos en un vaso de batidora, junto con el resto de los ingredientes, la vaina de vainilla la abrimos por la mitad y sacamos las semillas incorporándolas a la mezcla. Batimos a intensidad media hasta obtener una crema ligera, tapamos y a la nevera a que repose durante media horica más o menos.



En ese rato se descongeló la masa de hojaldre, entonces la puse en el molde previamente engrasado, y la cocí en el horno a 180º durante 10 minutos, pasado este tiempo añadí el relleno y cocí durante 25-30 minutos más o menos, si no se deja hasta que al pinchar salga limpio.

La verdad a mí me gustó muchísimo
si no tengo otra en mente la próxima cena con amigos tendrá este postre.