viernes, 30 de septiembre de 2011

Mis Pop-Cakes


El otro día vi en la página de WK los pop cakes con forma de corazoncito, me pareció una idea chulísima y como ayer teníamos una cena me puse manos a la obra, tras unas cuantas dudas decidí rellenarlos con apple pay (relleno de manzana), no sin algún que otro problemilla que os contaré un poco más adelante en la receta, y de sirope de fresa (por si el relleno de manzana salía mal).
Como me sobraba un poco de chocolate fondant decidí usarlo para los cakes de fresa, pero mi chico probó el de manzana poniéndole un poco de chocolate y me pidió que se lo pusiese a todos, así que le hice caso.
Como no tenía mucho tiempo compré unas placas de masa quebrada, el resultado ha sido bastante bueno, pero para la próxima vez intentaré hacer yo misma la masa.
Para el relleno los ingredientes son:






La elaboración súper fácil, mezclamos bien todos los ingredientes y ya tenemos el relleno.
Yo saqué una placa de masa quebrada y la extendí un poquito con el rodillo  porque me pareció que estaba muy gruesa, luego con unos moldes (que yo me compré muy baratitos en esa tienda sueca de muebles) se cortan los cakes, se rellenan las bases y se tapan con otro recorte, se une con los dedos presionando un poco y se sela con laspuntas de un tenedor. Para terminar se pintan con un huevo batido.
Se precalienta el horno a 190º , pero cuando fui a introducirlos me di cuenta de que no había añadido la mantequilla al relleno...el caso es que tras un par de minutos mirando fijamente mis cakes y luego a Chiro (mi gatito), que no paraba de maullar a ver si se me ocurría algo, decidí hacerles un hueco en el centro con ayuda de un cuchillo y ponerles un trozo de mantequilla a cada uno, a mí me ha funcionado, pero me imagino que con la mantequilla bien integrada desde el principio serán mucho más ricos.
Y luego los bañé con chocolate fondant derretido (como 1:30 minutos al microondas y dando vueltas cada 30 segundos para que no se pegue) y listo.

La verdad es que estaban bastante ricos, repetiremos,

domingo, 25 de septiembre de 2011

Celebrando el otoño



Este fin de semana ha comenzado el otoño es una estación genial me encanta el colorido que tiñe las calles, ese contraste cálido de los árboles anaranjados frente al cielo encapotado y gris justo antes de que empiece a llover. Mirar a través de la ventana mientras fuera llueve a cántaros, y un cafecito ayuda a entrar en calor.
Así que para celebrarlo y despedir al verano he preparado una cena un poco especial que consiste en un pastel crujiente de patata y espárragos, muy otoñal, acompañado de una ensalada de melón y queso de cabra, más fresquito.

No me costó mucho encontrar una receta más otoñal ya que había visto en la tele el pastel que hizo Jamie Oliver, y me quedé con tantas ganas de hacerlo que no vi mejor ocasión para probarlo, la ensalada me pareció un gran acompañamiento que además ya habíamos probado antes y nos encantó .
Para el pastel para 2 personas los ingredientes son:

Lo primero cocemos las patatas con sal hasta que estén blanditas. Escaldamos los trigreros, yo lo hice en el microondas, para ello puse los espárragos en un plato hondo con un poco de pimienta y agua. Calentamos a máxima potencia durante un minuto. Reservamos.
Aplastamos las patatas con un tenedor haciendo un puré, añadimos los quesos rallados.
Aparte mezclamos los huevos, la nata, la nuez moscada y un poco más de sal.
Calentamos la mantequilla un poco, hasta que esté líquida. La usaremos para pintar las hojas de filo que una a una iremos poniendo sobre la bandeja de horno y embadurnando de mantequilla.
Cuando tengamos todas añadimos la patata con queso y por encima pondremos la mezcla de nata y huevo.

Culminaremos con los trigueros por encima. Con cuidado enrollaremos los bordes de la pasta hacia dentro del pastel, a mí no me salió muy bien, pero no pasa nada, también quedó muy bonito todas las puntas abiertas como una flor.

Introduciremos en el horno durante 20 minutos con calor sólo por abajo. Luego 1o minutos más por arriba y abajo o hasta que pinchemos el pastel con un cuchillo y salga limpio.





Para la ensalada los ingredientes son:

Colocamos los brotes en un plato, salpimentamos. Hacemos bolitas con el melón y las añadimos, desmenuzamos el queso de cabra y por encima de todo echamos la cebolla picada muy finita.
Culminamos con aceite y la reducción de balsámico.
Las fotos de la ensalada no las puedo poner porque no he podido sacarlas de la tarjeta, creo que se ha roto :-(

La verdad es que esta cena con un buen vino tinto fue deliciosa, tendremos que repetirla.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Propuesta de septiembre CWK


Whole kitchen en su propuesta
Salada para el mes de septiembre nos invita a preparar un clásico de la cocina italiana, la Pizza


En casa nos encanta la pizza así que cuando vi que era la nueva propuesta de Whole Kitchen fue genial. Anteriormente ya me había lanzado a hacer masa para pizza (ya está publicado en el blog), y aunque la primera vez los resultados fueron muy buenos me gustó la idea de poder mejorarla puesto que quedó una masa muy gorda.
Además quería intentar hacer una pizza que nos gusta mucho, aunque con mi toque, la pizza Melanzzana.
Ingredientes (sale una pizza familiar)

Para hacer la masa, primero se mezcla la harina con la sal y la levadura granulada en un recipiente amplio, también añadí un poco de azúcar moreno porque leí que así se quedaba más doradita. Se hace un volcán en el centro y añadimos el agua y el aceite de oliva.
Como me acabo de comprar una amasadora no vi mejor momento para estrenarla, así que amasé a velocidad media. Unos 5 minutos, hasta que la masa se desprende de las paredes del cuenco.
Pasamos a una mesa enharinada ligeramente, y amasamos. Para que la masa quede elástica y suba bien, aplastamos y estiramos la masa con la base de la mano, doblamos la masa por la mitad y presionamos de nuevo con la base de las dos manos. Repetiremos el proceso de forma continuada durante cinco minutos.
Mientras amasamos espolvoreamos un poco de harina, no mucho que si no se puede endurecer.
A continuación se refina la masa. Para ello hay que aplastar y retorcerla, girándola y dando forma alargada sobre la mesa. Unimos los extremos y se amasa con los puños hasta fusionar el conjunto. Repetimos durante 5-10 minutos.
Una vez que está la masa lisa y elástica hacemos una bola y la pasamos a un cuenco y la aceitamos un poco. Se cubre con film transparente o con un trapo limpio y se deja fermentar en sitio cálido durante 30-40 minutos, o hasta que doble su volumen.
Una vez fermentada, pasamos a la mesa enharinada y estiramos la masa con rodillo hasta que quede fina, máximo unos 3-4 mm. de grosor, dependiendo del resultado final que busquemos.
Si nos gustan pizzas muy finas y crujientes, deja reposar la masa en una bandeja de horno durante 10 minutos, cubre con los ingredientes, yo puse salsa de tomate, unas rodajas de mozzarella, unas rodajas de berenjena (marcada en la sartén) y cebolla caramelizada riega con un hilo de aceite de oliva virgen y hornea a horno muy fuerte, 250º-290º unos 20 minutos, o hasta que quede crujiente y dorada.
Cuando la saqué del horno le añadí unas hojas de rúcula, unas lascas de parmesano y reducción de balsámico de Módena.