Mostrando entradas con la etiqueta Postres. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Postres. Mostrar todas las entradas

lunes, 20 de enero de 2014

Como un flan...de chocolate

Os presento mis primeros flanes, bueno he de reconocer que no son mis primeros flanes, pero sí son los primeros que me salen buenos. Cuando los desmoldé, comprobemos la textura, cogí una cucharada y los probé, me sentí genial, por fin podía publicar esta deliciosa receta. En casa la disfrutamos hasta la última cucharada, 
Os dejo los ingredientes.
600 mililitros de leche, 140 gramos de chocolate fondant, 190 gramos de azúcar, 2 yemas, 2 huevos, caramelo (agua y azúcar).


Lo primero precalentamos en el horno a 180° una fuente con agua, teniendo en cuenta que la usaremos para hacer el baño María a los flanes, así que una vez que estén dentro las flaneras no puede cubrirlas enteras y tienen que caber todas. Ahora fundimos en un cazo el chocolate junto con la leche y la mitad del azúcar sin dejar de remover hasta que se disuelva todo el chocolate. Dejamos calentar hasta que rompe a hervir entonces retiramos del fuego y damos un par de vueltas para evitar que se pegue por el calor. Dejamos enfriar mientras en un bol profundo batimos las yemas con el huevo y el resto del azúcar hasta que espume. Cuando la leche esté un poco templada la añadimos poco a poco a la mezcla de los huevos, mientras damos vueltas para evitar que cuajen. Rellenamos el fondo de los moldes con caramelo, aquí fui un poco vaga y use caramelo líquido del que venden en los supermercados. Y por último rellenamos los moldes con la mezcla anterior. Introducimos las flaneras en la fuente de horno al baño maria con cuidado y dejamos cocer durante 45 o 50 minutos. Vamos pinchando con un palillo para
comprobar cuando se cuajan. Una vez salga el palillo limpio sacamos del baño María las flaneras y dejamos que se enfríen para conservarlos (en mi caso el poco tiempo que han durado) los guardamos en la nevera.




jueves, 16 de febrero de 2012

Con una mermelada para empezar

Madre mía cuanto tiempo desenganchada del blog, es que últimamente he tenido demasiadas cosas que hacer para unos días tan cortos. Pero vuelvo con fuerza y con muchas ganas de cocinar y publicar.
He de reconocer que todo este tiempo no he estado parada, además me han regalado un par de libros de cocina muy interesantes; mi hermano me regaló uno de cocina vegetariana, al que pienso sacarle mucho jugo; y mi chico me dio la súper sorpresa con el nuevo libro de Jamie Oliver, me hizo una ilusión tremenda, y ya aviso que se pueden ir preparando mis amigos porque pienso experimentar todos esos deliciosos menús con ellos.
Pero hoy comparto una receta de mermelada de fresa en este caso, tenía dudas de su consistencia pero resultó deliciosa.
Ingredientes:
500 gr. De fresas
250 gr. De azúcar
Zumo de un limón

La elaboración es bien sencilla, primero lavamos y quitamos el rabo de las fresas y las cortamos en cuatro cuartos. Cuando estén todas limpias las pesamos y en relación a ese peso pondremos la mitad de azúcar es decir de 1 a 1/2.
Ahora en una sartén que pondremos al fuego añadimos las fresas, azúcar y zumo de limón y damos vueltas a la mezcla sobretodo al principio y al final para evitar que se nos pegue. Yo lo tuve así hasta que se deshizo la fruta aunque ayudé un poco con la cuchara, en tiempo una horita más o menos.
Seguidamente la envasaremos al vacío para ello previamente habremos hervido durante 10 ó 15 minutos los botes con sus tapas, para evitar que se rompan ponemos un paño al fondo de la cazuela. Se rellenan los botes hasta el borde con la mermelada, se cierran y se vuelven a hervir durante otros 15 minutos así los tendremos envasados al vacío y aguantarán más tiempo. Según he leído así se conservan durante un año o dos, el elemento que actúa de conservante es el azúcar, y el limón de antioxidante, así que si queréis disfrutar de una mermelada libre de aditivos os invito a que la preparéis porque además el sabor es más intenso y natural.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Y de postre... Polvorones de mantequilla




El polvorón es uno de esos postres que recuerdo desde bien pequeñita, siempre me han gustado. Su sabor dulce y tostado de la almendra y el ajonjolí, la textura suave y delicada que se deshacía en cuanto entraba en contacto con la lengua, incluso tener la boca llena y que tu padre te pida que digas "Pamplona" con el consiguiente desparrame del polvorón y dejando todo el suelo estucado jejeje. La verdad es que se me hace la boca agua solo de pensar en esos deliciosos dulces. Solo hay un problema, que están hechos con manteca de cerdo y claro al ser vegetariana es un pequeño inconveniente, y ya son casi 13 años sin ellos, así que tanto los echaba de menos que decidí hacerlos yo misma pero con mantequilla.     

Dado que estamos en estas fechas me aproveché del gran privilegio que supone tener un pastelero en la familia y me fui a su Obrador a recibir una clase práctica de elaboración de polvorones, y el resultado ha sido bastante bueno. A pesar de que tuve algún problemilla con la masa, cosas de principiantes. Ahí os dejo la receta.

Es súper fácil de hacer, hay que mezclar todos los ingredientes y amasar yo empecé con la batidora y los ganchos, pero como no estaba obteniendo el resultado esperado continué a mano. Creo que si no tenéis una amasadora con el accesorio de las palas es mejor hacerlo del modo tradicional. Después de estar bastante rato amasando tiene que quedar una consistencia compacta pero manejable. Hacemos una bola con la masa, aplastamos un poco con la mano y con un rodillo y mucho cuidado la extendemos hasta dejarla de un grosor de unos 2 ó 3 centímetros. Ahora con ayuda de un cortapastas de forma redonda recortáis los polvorones. Los ponéis en una bandeja de horno con papel vegetal y al horno a unos 200° durante 10 minutos más o menos, hay que dejar que tomen color pero que no se doren porque si se queme amarga.
Y voilà polvorones listos para la cena de nochebuena...aunque con las ganas que les tengo no creo que lleguen, tendré que preparar una segunda tanda.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Desayuno navideño



La Navidad ya ha llegado a casa, y esta semana como es tradición he sacado de sus cajas el árbol, las bolitas, espumillón, Papas Noel y demás adornos que hemos reunido a lo largo de los años y de los viajes que por trabajo ha tenido que hacer mi chico para estas fechas, de los cuales siempre trae algún adorno navideño autóctono.
Así que después de estar media tarde liada con las bolitas, renos, calcetines gigantes y luchar contra mi gatito (cachorro) que está convencido de que todo aquello que cuelga del árbol son sus juguetes, me ha invadido un espíritu galletero y me ha apetecido hacer galletas de jengibre que son muy típicas de estos días.
Se me metieron en la cabeza días atrás hablando con Carmen, una compañera de trabajo que me decía que tenía muchas ganas de volver a comerlas, y con ese "run run" me puse a buscar y rebuscar por internet hasta que di con una receta que me gustó porque incorporaba la miel, que me encanta.
Mientras las hacía, ya totalmente abducida por Papá Noel, decidí hacer paquetitos regalo para unas buenas amigas mías, y desearles con ellos unas "Felices Fiestas", y espero que hayan podido disfrutarlas igual que yo en una mañana con un buen café.



Son muy sencillas, es la primera vez que las hacía y no me vi perdida en ningún momento. Primero tamizamos la harina con la maicena, el jengibre y la levadura en un bol.
Aparte mezclamos la mantequilla con el azúcar, luego añadimos el huevo, la miel, la vainilla y la sal. Cuando tenemos todo bien mezcladito unimos la harina con esta mezcla.
Cuando la masa ya no se pega mucho a las paredes del bol hacemos una bola con ella y la envolvemos en palel film, y dejamos reposar durante una hora en la nevera.
Pasado este tiempo precalentamos el horno a 180º por arriba y abajo, y ponemos una lámina de papel film en la superficie de trabajo, encima ponemos la masa, y encima de esta otra lámina de papel film, así evitamos que al amasar se pegue al rodillo.
Entonces con el rodillo aplanamos hasta dejar la masa con un grosor de aproximadamente medio centímetro. Con ayuda de un cortapastas cortamos las galletas y las vamos poniendo encima de papel vegetal en un bandeja de horno, reamasamos y volvemos a cortar, así hasta terminar con la masa. La primera tanda de pastas se deja durante unos 8 minutos o hasta que las galletas toman un tono dorado, las siguientes seguramente se harán un poco antes.
Las dejamos enfriar y las guardamos. Yo las dejé en un plato tapadas con papel film porque sabía que iban a durar poco, pero si van a estar más tiempo es mejor guardarlas en un tarro hermético.

Así que al día siguiente les llevé un par de paqueticos a las dos amigas, y pude compartir con los compañeros de trabajo y desayunar el sábado, me supieron a gloria, de hecho creo que esto podría convertirse en una tradición como el árbol, los renos, los adornos del mundo y los gatos que piensan que el espumillón es un juguete.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Receta calabacera n° 2


La tarta de calabaza o Pumking Pie es un postre típico americano que se sirve tradicionalmente en acción de gracias, aunque lo toman hasta la navidad, su ingredientes principales son la calabaza, evidentemente, y una mezcla de especias como canela, clavo, nuez moscada y jengibre. Tanto gusta que hasta venden latas con la carne de la calabaza ya preparada para realizar esta tarta, así como la mezcla de especias ya hecha, como en España es más difícil de encontrar tuve que hacer la mezcla yo misma. Este postre se caracteriza por ser dulce, de textura suave y cremosa, y con un sabor especiado que lo hace delicioso.

Como todavía tenía pendiente alguna recetas más con aquella calabaza recién sailidica del huerto que conseguí, aproveché que teníamos una comida familiar para hacer esta tarta, y así pude demostrar a algún que otro escéptico de la gastronomía americana que tengo en la familia, que hasta los "yankis" saben cocinar jejeje.

Bueno aquí os dejo la receta que seguí, la mezcla de especias como ya os he dicho la hice yo a mi gusto no quise arriesgar con el clavo así que seguí más o menos la siguiente proporción: 1'5 /3 de canela; 1/3 de jengibre; 0'5/3 de nuez moscada.

Intenté preparar la masa quebrada, pero fue otro de mis intentos culinarios "quebrados" para la próxima vez seguro que me sale. Así que tiré de congelador y una placa de hojaldre que siempre tengo de guardia por si acaso. Una vez resuelto este problema hice el relleno, para ello lo primero asé la calabaza con piel, porque luego es mucho más fácil desprenderla. Una vez asada la ponemos en un vaso de batidora, junto con el resto de los ingredientes, la vaina de vainilla la abrimos por la mitad y sacamos las semillas incorporándolas a la mezcla. Batimos a intensidad media hasta obtener una crema ligera, tapamos y a la nevera a que repose durante media horica más o menos.



En ese rato se descongeló la masa de hojaldre, entonces la puse en el molde previamente engrasado, y la cocí en el horno a 180º durante 10 minutos, pasado este tiempo añadí el relleno y cocí durante 25-30 minutos más o menos, si no se deja hasta que al pinchar salga limpio.

La verdad a mí me gustó muchísimo
si no tengo otra en mente la próxima cena con amigos tendrá este postre.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Mis Pop-Cakes


El otro día vi en la página de WK los pop cakes con forma de corazoncito, me pareció una idea chulísima y como ayer teníamos una cena me puse manos a la obra, tras unas cuantas dudas decidí rellenarlos con apple pay (relleno de manzana), no sin algún que otro problemilla que os contaré un poco más adelante en la receta, y de sirope de fresa (por si el relleno de manzana salía mal).
Como me sobraba un poco de chocolate fondant decidí usarlo para los cakes de fresa, pero mi chico probó el de manzana poniéndole un poco de chocolate y me pidió que se lo pusiese a todos, así que le hice caso.
Como no tenía mucho tiempo compré unas placas de masa quebrada, el resultado ha sido bastante bueno, pero para la próxima vez intentaré hacer yo misma la masa.
Para el relleno los ingredientes son:






La elaboración súper fácil, mezclamos bien todos los ingredientes y ya tenemos el relleno.
Yo saqué una placa de masa quebrada y la extendí un poquito con el rodillo  porque me pareció que estaba muy gruesa, luego con unos moldes (que yo me compré muy baratitos en esa tienda sueca de muebles) se cortan los cakes, se rellenan las bases y se tapan con otro recorte, se une con los dedos presionando un poco y se sela con laspuntas de un tenedor. Para terminar se pintan con un huevo batido.
Se precalienta el horno a 190º , pero cuando fui a introducirlos me di cuenta de que no había añadido la mantequilla al relleno...el caso es que tras un par de minutos mirando fijamente mis cakes y luego a Chiro (mi gatito), que no paraba de maullar a ver si se me ocurría algo, decidí hacerles un hueco en el centro con ayuda de un cuchillo y ponerles un trozo de mantequilla a cada uno, a mí me ha funcionado, pero me imagino que con la mantequilla bien integrada desde el principio serán mucho más ricos.
Y luego los bañé con chocolate fondant derretido (como 1:30 minutos al microondas y dando vueltas cada 30 segundos para que no se pegue) y listo.

La verdad es que estaban bastante ricos, repetiremos,